Un día traquilo, en el que establezco nuevos planes en Chiang Mai, y por supuesto voy a jugar a juegos de mesa de nuevo. Un nuevo plan en Chiang Mai… o dos, son los que me saqué de la manga este día
La rutina matutina comenzó como todos los días anteriores en Chiang Mai. Desayuno con fruta fresca y una lata de ese café que ya se había vuelto una especie de ritual en mi día a día. Luego, disfruté del balcón de mi apartamento con vistas a la piscina y las majestuosas montañas que siempre me recordaban lo afortunado que era de estar en este rincón del mundo. La jornada laboral prosiguió como de costumbre, con un almuerzo en uno de los restaurantes del condominio.
Nuevos planes en Chiang Mai
Sin embargo, la sorpresa llegó en forma de un mensaje en uno de mis grupos de WhatsApp. Alguien sugirió una excursión a Doi Inthanon, la montaña más alta de Tailandia, para el día siguiente. Un buen plan en Chiang Mai desde luego. La oportunidad de explorar este asombroso lugar despertó mi interés, y me inscribí de inmediato. Sabía que tendría que descansar bien esa noche, ya que el madrugón estaba programado para la siguiente jornada. Y no quería estar cansado.
Una vez terminada mi rutina de trabajo, me dirigí nuevamente al lugar de juegos de mesa. Allí, encontré a mis compañeros habituales, «FrankfurtMan» y «ManchesterMan», y nos sumergimos en emocionantes partidas de «Dune».
Manchesterman se va a China
Fue durante este día que «ManchesterMan» nos sorprendió con una noticia emocionante: planeaba mudarse a China. Había asegurado un trabajo como profesor de inglés, con un salario atractivo y la perspectiva de una nueva vida. Además, mencionó que tenía una novia en China, lo que hacía que la decisión fuera aún más lógica para él. Estábamos encantados por su emocionante aventura, aunque sabíamos que su partida dejaría un vacío en nuestra comunidad de juegos de mesa.
Durante nuestras conversaciones, también surgió la noticia de una fiesta que se celebraría al día siguiente en un bar cercano a nuestros condominios. Se promocionaba como el «Brazilian Carnival en Chiang Mai». «FrankfurtMan» y yo no dudamos en decidir que asistiríamos a la fiesta, sintiéndonos intrigados por lo que nos esperaba. Lo cual era otro plan en Chiang Mai, que no me dejó indiferente.
Después de disfrutar de nuestras partidas de «Dune«, nos dirigimos a un bar cercano a casa para tomar una última bebida y hablar sobre la próxima fiesta. Sabíamos que el día siguiente sería intenso, pero estábamos listos para la diversión que nos esperaba.
Finalmente, regresé a mi apartamento para descansar, consciente de que la próxima jornada sería un nuevo capítulo en mi emocionante viaje en Chiang Mai